Elegantes y puntuales, así acudieron ayer los jugadores de Barcelona, junto a su dirigencia, a la cita con el primer mandatario de la República, Rafael Correa, en el Palacio de Carondelet. Los integrantes del actual puntero del certamen local fueron parte del cambio de guardia presidencial que cada lunes se realiza en la casa de Gobierno.
Por eso, junto al mandatario Correa salieron al balcón presidencial y elementos como el golero Máximo Banguera, el técnico Gustavo Costas, Matías Oyola, entre otros, saludaron a cerca de 1.500 personas que se agruparon en la Plaza de la Independencia.
Aplausos y uno que otro cántico para el “Ídolo del Astillero” se escucharon, siendo el volante argentino Damián Díaz el más efusivo ante el presidente Correa, con quien estrechó por varios segundos la mano. El Mandatario, burlón, aprovechó para reiterarle su insinuación de quitarle el permiso para actuar en el “Ídolo del Astillero” que apareció en su cuenta de Twitter @ MashiRafael, luego de la derrota del equipo de sus amores, Emelec, en el Clásico.
Enseguida, toda la comitiva deportiva ingresó al interior del Palacio y tras una breve pausa para posar ante las cámaras de los medios de comunicación iniciaron el recorrido por las instalaciones.
En cada paso que daban se mostraban sorprendidos por las cosas nuevas que descubrían. Pasaron por el Salón Amarillo y el museo, lugares en los que se empaparon y algunos recordaron la historia del Ecuador. Incluso tuvieron tiempo de visitar y conocer la residencia que sirve como hogar del Primer Mandatario.
La guía turística mantuvo muy entretenidos a los jugadores extranjeros y también al técnico Gustavo Costas. Durante la visita, varios funcionarios administrativos -hinchas del equipo porteño- aprovecharon para fotografiarse y conseguir autógrafos en camisetas y bufandas.
En el recorrido pudieron conocer imágenes talladas en madera de artistas ecuatorianos en las que prevalecía el aspecto religioso. Tras concluir el paseo por Carondelet y la reunión que el presidente Correa mantuvo con algunos de sus ministros, llegó la hora del almuerzo de homenaje al conjunto que ganó la primera etapa del campeonato actual y es finalista.
En el interior del salón de banquetes, que lució decoraciones de balones con los colores amarillo y negro, varios jugadores se despojaron de sus chaquetas y, más relajados, sostuvieron amenas charlas que matizaron la comida.
Entre los invitados destacaron ex glorias del elenco guayaquileño, como Raúl Noriega, Agustín Delgado, Claudio Alcívar, entre otros. Además, estuvo presente el ministro del Deporte, José Cevallos, uno de los más entusiastas al saludar a ex compañeros con los que compartió vivencias en el club guayaquileño.
En sus palabras de bienvenida, el gobernante felicitó la tarea que cumple el equipo 13 veces campeón del Ecuador, pero manifestó entre risas: “No es justo que dos veces en este año nos hayan ganado el Clásico del Astillero, deben ser más generosos con Emelec”.
La comida, preparada pensando de manera exclusiva en los integrantes del cuadro del Astillero, incluyó un postre con el sello del conjunto porteño.
El menú tuvo como entrada pulpo a la chalaca, el plato fuerte fue un lomo fino con arroz y vegetales; y el toque final fue una torta “torera” de maracuyá y oreo.
Fuente: www.eltelegrafo.com.ec