Conseguir el boleto a la final del campeonato nacional, como ganador de la primera etapa, motivó la invitación directa para Barcelona al Palacio de Carondelet, donde ayer la plantilla de jugadores, cuerpo técnico y dirigentes compartieron un almuerzo con el mandatario Rafael Correa.
Vestidos con traje negro y corbata amarilla, los canarios llegaron a Carondelet a las 11:00. La agenda de actividades del plantel incluyó su asistencia al cambio de guardia de la escolta presidencial, acto en el que Máximo Banguera, Damián Díaz, Matías Oyola; el DT Gustavo Costas; los directivos Antonio Noboa y Luis Noboa estuvieron como invitados de honor en el balcón junto a Correa, mientras el resto del plantel se ubicó en la parte baja del Palacio de Gobierno.
En el interior de Carondelet, los canarios realizaron un recorrido por sus instalaciones, para a las 13:15 pasar al Salón de Banquetes, que estuvo decorado con balones amarillo y negro. “Felicitaciones a los jugadores porque están en un gran nivel, mucha suerte en la Copa Sudamericana donde nos representan. Felicitaciones también a la directiva, al cuerpo técnico, porque sabemos que esto es (trabajo de) directiva, pero también mano de técnico”, resaltó el mandatario.
Durante el brindis, Correa, hincha de Emelec, bromeó con los futbolistas y los triunfos obtenidos en esta temporada por Barcelona en el estadio Capwell, pero también con algunos invitados que le pidieron que hiciera el brindis “con el vino amarillo”, en relación con la divisa de los toreros, a lo que Correa respondió: “Tengo que reconocer que es en lo único que no estoy con las grandes mayorías, pero felicidades a Barcelona y suerte, pero no me exageren que ya van dos clásicos (ganados) en el Capwell; así tampoco, eso es grosería”.
En la mesa principal el mandatario estuvo junto a algunas exglorias del club, hoy enroladas con el Ministerio del Deporte como José Cevallos, titular de esta cartera, además de los funcionarios Luis Gómez y Jimmy Montanero. A la cita también acudieron como invitados los exjugadores Raúl Noriega, Claudio Alcívar, Agustín Delgado, entre otros, que recibieron una distinción especial.
Los toreros dijeron sentirse como en casa y degustaron un menú preparado especialmente para los barcelonistas, con platillos como pulpo a la chalaca; de plato fuerte un lomo fino como el sol, arroz con pimientos y vegetales al pesto; para cerrar con una torta torera de maracuyá y galletas.
El plantel dejó también un recuerdo al mandatario: una camiseta verde con el 35, color y número de lista relacionados con el partido de gobierno.
Fuente: www.eluniverso.com
