viernes, enero 24, 2014

¿Estamos preparados para jugar sin mallas?

El 24 de agosto del año pasado, un policía fue lanzado a la fosa que divide los graderíos de la cancha del estadio Olímpico Atahualpa por hinchas que evadieron las mallas para agredirse antes del juego entre Deportivo Quito y Liga de Quito. Por ese incidente, el Ministerio del Interior dispuso que la Policía no custodie más la seguridad en los escenarios, aunque luego no se ejecutó la orden.

Ahora, cinco meses después, esa misma cartera de Estado, la del Deporte y la Ecuafútbol se congratulan por la eliminación de esas barreras. Las autoridades prefieren “confiar en la cultura y educación del ciudadano que asiste a un escenario deportivo”, según dijo el presidente de la FEF, Luis Chiriboga, el miércoles pasado, cuando simbólicamente se retiró la última malla en el estadio Atahualpa, el primero en el plan que se prevé aplicar progresivamente en todo el país hasta fin de año.

La medida no sorprende al árbitro Carlos Vera, designado por la FIFA para dirigir en el Mundial Brasil 2014, quien ve “positivo” que se retiren las barreras de los estadios.

Vera, miembro del gremio de árbitros que el año pasado amenazó con no dirigir ningún encuentro del torneo local tras la agresión que sufrieron los jueces en un partido en el Olímpico de Ibarra entre Delfín y Pilahuín Tío, este último suspendido por la FEF, dice que hay acciones ejemplares contra clubes y futbolistas y que para castigar a los malos hinchas “están las leyes para aplicar penas”.

Este juez internacional, que ya ha dirigido en estadios sin mallas en Colombia, Venezuela, Japón y Turquía, espera que ahora se incremente la seguridad al borde del campo, sea pública o privada, “dirigiendo la mirada a los espectadores”.

Pero el gerente de la Asociación de Fútbol No Amateur de Pichincha (AFNA), Galo Barreto, aclara que en el país no hay empresas de seguridad privadas especializadas en grandes eventos. “Y si las hubiera, no tienen facultad legal para intervenir, eso solo lo puede hacer la Policía”, menciona, por lo que se descarta el incremento de vigilancia particular.

A Barreto le preocupa qué alternativas de seguridad se tomarán sin las mallas. Aníbal Fuentes, presidente de la Concentración Deportiva de Pichincha, entidad que maneja el escenario de El Batán, dice que allí se cuenta actualmente con cuatro cámaras “que pueden identificar a quien lanza una piedra, pero no tienen un poder de resolución como para identificar plenamente la cara”.

Por eso el Ministerio del Interior ha ofrecido dotarlo de mejores dispositivos, aunque no se ha señalado cuándo. Hasta tanto se difunde una campaña mediática para evitar la violencia en los estadios.

Luis Chiriboga
Presidente de Ecuafútbol
"Delegados de los ministerios del Interior, del Deporte y la Federación Ecuatoriana hicieron un curso de un mes en Inglaterra y en poco darán seminarios a los jefes de seguridad en todos los estadios".

Ulises de la Cruz
Exfutbolista y legislador
"Se debe hacer una inversión mayor, porque el tema de cámaras será importante, pero los directivos y los líderes de barras deben dialogar, no con violencia".

4 cámaras de alcance panorámico tiene el Atahualpa.

Fuente: El Universo