miércoles, julio 31, 2013

Michael J. Quiñónez: El eterno lesionado

Barcelona reportó que Michael Jackson Quiñónez sufrió rotura fibrilar del recto anterior del muslo derecho. Esto es cosa de no creer, otra vez el jugador de las "piernas de cristal" se vuelve a lesionar, ya la gente no recuerda cuándo fue la última vez que tuvo continuidad, la recurrencia de sus lesiones musculares ya es algo inaudito, no puede ser normal ni coincidencia que "MJQ" siempre sufra el mismo tipo de lesión, Barcelona debe investigar al respecto porque de este modo el jugador no es ningún aporte al club.

Unos cuantos partidos de brillantez el primer semestre del año pasado lo catapultaban como un jugador clave en el andamiaje de Barcelona pero luego comenzó su visita continua a centros de rehabilitación física por sus constantes desgarros musculares, muy lejos quedaron los goles de buena factura que nos regaló el primer semestre del año pasado y en copa sudamericana, de ahí no ha dado más que dolores de cabeza.

Muchas hipótesis se ciernen entorno de este particular hecho, algunas hablan de negligencia por parte del jugador en el correcto descanso que se debe tener en casa, el famoso "entrenamiento invisible", otros hablan de una mala práctica médica para con el jugador lo que le impide recuperarse del todo, otros van más allá y piensan que el excesivo entrenamiento físico con pesas ha causado problemas al jugador, lo cierto es que cualquiera fuere el motivo, Michael Jackson ya no es más que un lastre en Barcelona.

La ausencia de Damián Díaz hace crónica la necesidad de tener un conductor de juego, los llamados a cubrir en parte esta plaza son Matamoros y MJQ, era claro que a Barcelona no le iba a alcanzar cubrir el puesto de generador de juego con este par de jugadores debido a que el primero es muy irregular y el segundo es el eterno lesionado.

Barcelona requiere con urgencia hacer una evaluación física completa, determinar si esto es normal o hay negligencia, así como los jugadores exigen el reconocimiento de sus haberes económicos, los clubes deben exigir el cumplimiento a rajatabla de los deberes y obligaciones de los jugadores de fútbol, en caso de detectar falencias el club debe tomar acciones al respecto, no puede ser que un jugador llamado a ser un gran aporte no genere más que gastos y frustración.

A poner las barbas en remojo, así no llegamos a ningún lado.