De entrada Carlos Ischia se puso la vara alta en Barcelona. Descalifica la frase cliché "que el equipo esté en la pelea", sino que se compromete a formar un plantel "con objetivos firmes y claros para conseguir logros y campeonatos".
No cree que la crisis económica canaria se lo impida. El técnico argentino llega a un cuadro torero que tiene un déficit que sobrepasa los 20 millones de dólares, además de sueldos atrasados a la plantilla de jugadores; sin embargo, no le teme a esta realidad.
"Muy pocos equipos en el mundo pueden estar tranquilos en la parte económica. No me asusta este tipo de cosas porque muchas veces van a la par de cómo le va al equipo deportivamente", manifestó con un tono relajado el estratega, ayer, durante su presentación en la sala de prensa del estadio Monumental.
Ischia se presenta como uno de los encargados de solucionar este difícil momento económico. Para ello su método es darle éxitos a la institución. "En el 2012, cuando Barcelona ganó los dos torneos (primera y segunda etapa), no escuché de que tuviera tantos problemas económicos, fue un muy buen equipo que fue campeón; los inconvenientes vienen y se producen cuando los equipos no tienen un buen nivel".
El entrenador de Deportivo Quito considera que una plantilla con un buen rendimiento contagia a los aficionados para que el entorno sea favorable. "Cuando el equipo está bien y en las mejores condiciones, todo está bien, y cuando las cosas deportivamente no salen parecen estar de lo peor, si a uno le asustara de ese tipo de cosas no tendría que trabajar más en fútbol sino quedarse en su casa. Vengo a comprometerme con la institución de la mejor manera y entre todos vamos a sacar esto adelante".
La disciplina es un factor fundamental para Ischia, quien firmó su vínculo contractual por un año con Barcelona. Es contrario a los jugadores que toman decisiones que afectan su preparación por los sueldos incumplidos. "Por más que hayan inconvenientes económicos, problemas en los pagos, yo jamás pondré en campo un jugador que no se entrena en la semana o no pondré en campo un jugador que no se quiera concentrar para un partido. Creo que es una falta de respeto para el aficionado que paga su entrada".
Sobre la conformación de la plantilla, el DT realizará una evaluación con la directiva hasta el domingo para tener un primer panorama y, en lo posterior, decidir sobre la continuidad de jugadores y los posibles refuerzos para el Ídolo.
Fuente: Expreso