lunes, abril 09, 2012

Desde las gradas: Decepción Monumental


El Barcelona Sporting Club recibió a la Liga Deportiva Universitaria de Quito en el Estadio Monumental de Guayaquil por la fecha 10 de la primera etapa del torneo local. Con el Coloso del Salado a reventar los toreros empataron a un gol por bando y resignaron de nueva cuenta 2 puntos más en casa. Gol de tiro penal ejecutado por Mina al minuto 3 y gol de Bieler al minuto 89.

Para empezar voy a pedir disculpas porque por más imparcial y objetiva que se quiera ser en un partido como este, y si a eso le añadimos que vuelvo a mi estadio a los 15 años, fue muy difícil observar el encuentro a sabiendas que tenía que escribir este comentario y que no tenía que ser un hincha mas. El ambiente del Monumental te embruja y te lleva a volverte en momentos hasta irracional, y en donde el “glamur” y las buenas costumbres se evaporan apenas rueda el balón. Pero a pesar de ello, vamos a tratar de hacer un resumen fiel a lo acontecido y a llevarles como siempre una crítica constructiva del cotejo más importarte de la fecha.

Empecemos de atrás hacia adelante. Lanza es, y siempre será un arquero segundón. El gol de Bieler se lo regalo él. Sabíamos que este era un punto débil para este partido y nunca nos equivocamos. La línea de tres es sólida y funciona 100% mejor que la acostumbrada línea de 4, sin duda este es el esquema que se debe seguir utilizando de aquí en más. Aunque hay aun ciertas cosas que corregir. Campos quiere ser el que ordena y manda a su defensa, pero duda y es en cuestión de segundos que esa inseguridad pone en aprietos el arco torero. Erazo tiene complejo de “kamikaze”. Espero que alguien le diga que en partidos como este no hay como darse el lujo de querer bailarse al rival y salir jugando. Perlaza, bien. Pero sigue siendo tan rústico como de costumbre. Ya es hora que la experiencia que le da los años de profesión influya más en su juego y deje de ser un simple “rompe balones”.

En la mitad de la cancha la participación de MJ Quiñones, con el gordo Lucho, Carlos Grueso y Matías Oyola es bastante efectiva, aunque en honor a la verdad la media mejoro un mundo con la inclusión de Amaya, ya que este no solo corta y recupera, sino que muestra más destreza con el balón que Caicedo y tiene un plus que nuestro nacional carece: sabe repartir el esférico con claridad y con él empieza el ataque. Y si a esto le agregamos que fue el UNICO jugador del equipo amarillo que una y mil veces trato de levantar a la hinchada para que apoye, tenemos en él una pieza fundamental de este Barcelona. Carlos Grueso es un joven talento que desde ya hay que cuidarlo y seguirlo puliendo. Al chico le sobra lo que a muchos “consagrados” le falta y carece de lo que a muchos “colorados extranjeros” le sobra.

MJ Quiñones se ha ganado su puesto estelar en el equipo torero a punta de partidazos como este. Sin duda el jugador del partido. Este futbolista está en toda la media cancha y es siempre útil tanto en ofensiva como en defensa. Tiene una claridad para iniciar jugadas de ataque que pocos en nuestro futbol poseen y su manera de defender el balón, aunque no muy vistosa, es extremadamente efectiva. Esperemos que siga siempre así y que su enfoque fundamental mientras este en Guayaquil sea siempre Barcelona.

El capitán torero, Matías Oyola, es simplemente genial. Si antes cuando tan solo lo veía a miles de millas de distancia y por televisión ya lo admiraba como jugador, hoy también lo respeto como profesional a carta cabal. Por ahí dicen que no hay mejor modo de ver el futbol que desde las gradas porque solo así uno tiene una perspectiva absoluta de lo que acontece en el terreno de juego y esto es la pura y santa verdad. Matías Oyola no solo juega con pelota sino sin ella también. No solo se mueve cuando tiene la número 5 en sus botines, ya que no es menos a su talento para recuperar, marcar, estorbar y acosar.

Es cierto que aún falta mucho para que alcance su status de Ídolo dentro del Ídolo, y eso simplemente porque no lo lleva todavía a un campeonato, pero este jugador es uno de los que ya desde ahora DEBE ser propiedad de Barcelona. Hace muchos años que en Guayaquil no vemos un extranjero que tenga la capacidad, el despliegue y el amor a la camiseta y a su hinchada como Matías Oyola. Para él, como siempre, la gratitud eterna por sacrificarse en cancha para defender nuestra sagrada amarilla.

Ahora, la parte floja de partido otra vez tienen tinte argentino: Díaz y Luguercio. No sé si Antonio Noboa hable con los jugadores de vez en cuando, pero si no lo hace es tiempo que llame al señor con el 10 en la espalda y le ponga las cartas sobre la mesa: o se deja de pendejadas y juega como debe, o en Junio será, gracias, pero no. Es inconcebible ver como una y otra y otra vez Damián Díaz finge faltas. Sin exagerar pude contar 5 justo en frente de donde yo estaba parada. La táctica del señor es botarse al suelo cuando ya no puede pasar. Y lo peor es que es él solito el que se mete en aprietos siempre acorralándose contra una raya y queriendo pasar por en medio de dos contrarios. Es mejor que el Kitu deje su complejo de actor frustrado en su casa y que en el Monumental se dedique a jugar al futbol.

¿Y qué podemos decir de Luguercio? Si bien es cierto que vino a Barcelona como habilitador y no como goleador (pero le enfundaron el 7 de Carlitos Muñoz), hasta ahora no cumple con su función y tal vez no sea por no tener habilidad, sino por físico. Mientras seguramente las cámaras seguían la pelota, Luguercio se paraba en el campo de juego y ni pestañeaba del cansancio. Incluso hubo momentos en el que se ponía las manos en las rodillas para tomar aire. Y aparte de eso cuando corría con o sin balón, las piernas le parecían un fideo. Él debería desde ya buscar ser el mejor amigo del preparador físico.

“El goleador” Mina es mucho empuje, mucho moverse, mucho deseo, pero poca efectividad. Este jugador es limitado. No puede abrirse espacios. Es de los típicos delanteros que para ser efectivo tiene que llegarle una pelota limpia en una jugada clara y de frente al arco porque si recibe de espaldas es caso perdido. Aparte que está a años luz de saber cómo resolver un partido y peor de esta envergadura. Tuvo el triunfo en sus pies, al último minuto y fue él el que mató la ilusiones de millones de corazones amarillos y no Bieler.

No podemos olvidarnos de los otros dos que entraron al cambio. A Ibarra por favor que alguien lo siente a ver los partidos del Toño Valencia para que al menos así coja noción de lo que es un wing. Borghello ni la toco, poco podía hacer faltando 5 minutos.

Finalmente un consejo al señor Zubeldia. Cuando se va ganando por la mínima diferencia, con estadio a reventar, contra un rival súper difícil que viene tiempos bajos y que ésta era la oportunidad de ganarle, que se demore en los cambios y encima que faltando 5 minutos para que se acabe el cotejo meta a un delantero que viene sin inactividad en lugar de meter aunque sea al aguatero para que ayude a sostener el resultado fue una novatada que costó carísimo.

Al concluir la fecha, Barcelona terminó en la cuarta posición con 16 puntos y +8. El próximo partido será contra el Deportivo Quito en el Atahualpa el Viernes 13 de Abril a las 7PM hora de Ecuador. El Quito llega a este compromiso con 9 unidades y +2, en la casilla 11 de la tabla de posiciones.

Toreros, luego de un partido donde Barcelona tuvo todo para ganar pero que salió con el rabo entre las patas gracias a la poca capacidad de su arquero y la complicidad de los defensas a los que nadie les dijo que el partido se termina cuando pita el árbitro, es difícil pedir apoyo, paciencia y mil pamplinas mas. Si lo sabré yo que ví en las caras de mis hijos reflejada la amargura que sentíamos millones de barcelonistas, sin embargo hoy solo les pido amor a la camiseta, al club y respeto por nuestra historia.

Barce, en Guayaquil, en Pennsylvania, en el fin del mundo, siempre estaremos ahí para apoyarte.

Abrazos desde mi lindo Guayaquil,

Alexandra K Ortiz