El Ídolo de los ecuatorianos disputó la segunda fecha de la segunda etapa del torneo de Primera A del futbol nacional. Los Toreros recibieron en el Monumental de Guayaquil a los ambateños del Macará. Resultado final, Barcelona 4 – Macará 0. Los cuatro tantos del encuentro fueron marcados por el hoy goleador del campeonato ecuatoriano, con 18 goles en 24 fechas, Narciso Mina.
El ritmo del partido fue endiablado. Por momentos los equipos se prestaban el esférico para así llegar a la portería rival e inquietar a los arqueros. Varios tiros pasaron muy cerca de ambas porterías. Sin embargo, fue el equipo local, Barcelona, el que tuvo la precisión de embocar la pelota y mandarla al fondo de las redes.
Los primeros 15 minutos del encuentro Barcelona se volcó con todo su poder ofensivo y el portero del Macará una y otra vez haría gala de su elasticidad para así ahogar el grito de gol en las gargantas de los hinchas barcelonistas. Pero tanto da el agua al cántaro hasta que se rompe. Matías Oyola empieza recuperando el balón en la media cancha, avanza y reparte por izquierda para Roosevelt Oyola, este lanza un centro y ahí estuvo el goleador, Narciso Mina, para marcar su primer gol de la noche y la primera anotación para los Toreros.
Con un gol a los 15 minutos empezaría una noche inolvidable para Mina y sus compañeros. Hay que reconocer que el equipo de Gustavo Costas es una maquinita en cuestión orden. Desde Banguera, en el arco, hasta Mina en ofensiva, los barcelonistas saben perfectamente bien cuál es el rol que deben ejecutar y perfeccionar en la cancha. El acoplamiento entre los 11 jugadores es evidente y por ende, tanto en ofensiva como en defensa, Barcelona brinda pocas oportunidades de éxito para el rival.
En cada partido hay jugadores destacados, en este partido hubo varios. Empezando por el goleador, Mina, pasando por el volante de creación, Matamoros, por los laterales, Saucedo y Oyola, por los volantes de recuperación, Grueso y Matías Oyola, por los centrales, Campos y Perlaza, por su portero, Máximo Banguera, y terminando con la nueva contratación que dejó mucho más que una grata impresión, Ferreira, todo el equipo mostró un futbol simplemente excepcional. Todos fueron figuras.
Con el correr de los partidos se nota la comprensión que hay en cada una de las líneas del equipo Torero. Las micros sociedades funcionan con mínimo error; de aquella defensa de gelatina que cometía autogoles, ya no queda nada; de aquella media cancha imprecisa y del puntero timorato ya no hay sino el mal recuerdo. El Barcelona que hoy se para en las canchas del país nos recuerda a aquel que hacía sentir a millones de hinchas, orgullosos de vestir la sagrada amarilla y llamarse “barcelonista”, hincha del único Ídolo del Ecuador.
No hay duda que Barcelona y sus jugadores no solo están ganando partidos, sino confianza, agresividad y efectividad. La mano del técnico se nota y la costumbre goleadora ha sido devuelta al equipo guayaquileño. Costas no se conforma con ganar “medio a cero”. El técnico tiene aquella visión que solo los ganadores la tienen, hay que saber aprovechar las situaciones y sabiendo que el gol diferencia es vital, les exige a sus dirigidos siempre que sigan anotando hasta cuando se pueda. Recordemos que la primera etapa se ganó gracias al gol diferencia.
No se puede escoger cual de los goles fue el mejor. Pero sí hay que destacar que todos fueron en jugadas rápidas, jugadas que nacieron en la línea de defensa y que el balón se paseo por la cancha hasta terminar en las redes del contrario. Los jugadores han entendido que no se puede vivir de pelota parada o de milagros para anotar. Hoy se saben con la capacidad necesaria como para jugar al toque, con destreza y con efectividad, así se consiguen los triunfos.
Y no olvidemos que a este equipo que goleó al Macará le faltan elementos claves como Díaz, Ayovi, Quiñones y Arroyo que por motivos diversos aun no pueden participar de los partidos. Hoy Barcelona tiene la plantilla que debe tener un campeón. Jugadores de primer nivel se ha sumado al equipo Torero y eso ha sido un éxito que se debe reconocer a la dirigencia del presidente, León Antonio Noboa.
Toreros, ya con la punta del campeonato de nuevo en el bolsillo, nuestro equipo viajará a Venezuela para enfrentarse al Deportivo Táchira por el primer encuentro de la Copa Sudamericana 2012 este miércoles 25 de julio. Hoy nadie debe titubear en confiar que este equipo nos representará internacionalmente como siempre lo ha hecho, demostrando por qué es un grande de América y por qué a pesar de su ausencia, sigue siendo recordado, temido y admirado.
Si bien es cierto que lo que la hinchada barcelonista anhela más fervientemente es la 14, también es cierto que Barcelona tiene una reputación que cuidar y un pasado glorioso que respetar. Así que señores, amárrense los cinturones porque nuestro equipo tiene, debe y PUEDE salir a competir en América como lo que es, un grande, un campeón, ¡un IDOLO!
Abrazos desde Pennsylvania,
Alexandra K. Ortiz