Al Barcelona Sporting Club le toco visitar a la LDUQ por la séptima fecha de la segunda vuelta. En un interesante partido los toreros lograron regresar a Guayaquil con un punto en el bolsillo ya que el marcador quedo igualado a ceros. Ninguno de los dos equipos pudieron vencer la vaya rival por mas intentos que hicieron.
Los primeros quince minutos del partido fue un dominio total de los locales que aprovechando la movilidad y agilidad de Miller Bolaños llegaban una y otra vez a inquietar el arco de Máximo Banguera. En los primeros 10 minutos ya hubo una salvada por parte del portero barcelonés tras un cabezazo de Barcos y un palazo luego de un zapatazo de Miller Bolaños.
Desafortunadamente para los locales, su mejor jugador, Miller Bolaños, salió lesionado después del gran remate que pego en el vertical derecho de Banguera. Al minuto 12 Bauza se vio obligado a cambiar a un Bolaños por otro, salió Miller y entro el Chucho.
Alrededor del minuto 20 ya Barcelona se había asentado en la cancha y empezaba a mostrar el futbol vertical y preciso que se ha hecho característica en el plantel de Zubeldia. Hombre por hombre los toreros estuvieron aplicados y concentrados en su misión. Si hubo errores por parte de los visitantes, fueron mínimos y siempre estuvo un compañero atento para corregir y ayudar a rescatar alguna jugada peligrosa.
De nueva cuenta hay que felicitar el desempeño, el esfuerzo y el ahínco que mostro el “gordo” Lucho Caicedo, ya que fue dueño de su sector. Con la colaboración de Oyola y de Perlaza mantuvieron siempre bien controlado a Barcos que en más de una ocasión se vio con marca hasta de 3 jugadores y no le quedaba más remedio que soltar el balón a algún compañero.
La participación de Saucedo no desentono, supo estar bien parado y respaldando los espacios que dejaba en ocasiones el chico Ibarra. Por la otra banda, Nazareno le dio una gran ayuda al capitán Iván Hurtado, que en más de una ocasión quedo parado como estaca ante el ataque de los albos. Al principio Miller lo tenía a mal traer, luego fue González. Aunque al final, el capitán supo recuperar y cortar jugadas que hubieran sido muy complicadas para la escuadra guayaquileña.
Debemos reconocer que los albos siempre ponen el 100% de su esfuerzo cuando Barcelona los visita y esta vez no fue la excepción. Hubo 3 palazos y varios tiros de media distancia que Banguera pudo sacar al córner. Pero los barcelonistas también tenían lo suyo y respondían ataque con ataque.
La mejor jugada de los barcelonistas arranca de los pies de Bryan de la Torre, que sin duda fue el mejor de los toreros, al ponerle un pase por derecha a Pablo Palacios que punta de talento y habilidad con el balón dejo botados a Calderón primero y luego a Caicedo para ya contra la raya final logra sacar un centro perfecto que alcanza a levantar Díaz pero que el arquero Viteri logra atajar. Esas son las jugadas del “Rambo” Palacios que extraña la afición amarilla.
Y como en cada partido en el que los barcelonistas tienen la mala suerte de que el central sea el señor Carlos Vera hubo más de un error arbitral y claro, perjudicando claramente a los intereses de los guayaquileños. Empecemos por la cantidad de golpes que como siempre repartió Enrique Vera. Traía de golpe en golpe a Díaz, a De la Torre y a Oyola. Sabíamos que esa iba a ser la instrucción de Bauza, pero la agresividad de este jugador ya raya en el cinismo y total deslealtad ante un compañero de profesión.
Pero no solo Vera repartió golpes a gusto y placer, también lo hizo Calderón que casi le saca un ojo a Perlaza y sin embargo nadie dijo nada, luego Barcos quiso rematar al pobre “Avatar” y delante del línea, mas sin embargo, no hay como tocar a la estrella del equipo de “papito Rodrigo”. Giovanni Caicedo también lo traía como bombo en fiesta a Palacios y a De La Torre. Y aunque no estamos incitando a la violencia, Bryan se supo desquitar de Caicedo y se lo llevo por delante, jugada que mereció al menos amarilla pero Vera nos sorprendió a todos al no sacarla.
Lo del capitán albo fue asqueroso, ya que pasaba por detrás de Damián Díaz y se detuvo a darle un codazo. Esto por supuesto que tampoco lo vio el señor Vera ni ninguno de los asistentes ni tampoco el cuarto arbitro. Mas sin embargo estos si estuvieron atentos cuando supuestamente el asistente de Zubeldia lanzo una botella de agua y lo expulsaron. Es increíble como todas las miradas de los que están para impartir el orden se dedican a seguir a todos los que vistan amarillo y a nadie más.
No podemos dejar de destacar la muy buena participación de Damián Díaz, que a pesar de haber sido su primer partido en la altura, supo manejar su ritmo de juego de tal modo de que sus energías le duraron todo el partido. Pero lo mas importante fue que a su corta edad y aunque recién llegado a las filas toreras, supo hacerse respetar en la cancha y defendió la amarilla como el mejor de los amarillos. Nunca se achico ante los golpes ni las bajezas de los contrarios, y con cátedra de técnica con el balón les demostró que el futbol no es golpes sino habilidad con la redonda.
En fin, Barcelona no pudo ganar en ese estadio, pero eso es lo de menos porque lo importante es seguir sumando, el resto es consuelo de tontos para los que gustan de fijarse en detalles como esos. Lo importante es que los toreros lograron sumar un punto importante que los sigue manteniendo peleando los primeros lugares de la tabla.
Toreros, es con gusto y beneplácito que hoy todos vemos como este Barcelona juega al futbol con categoría, con garra y con técnica. Si en tan solo un par de meses Zubeldia logro tanto progreso en este equipo que estaba muerto, no podemos mas que pensar en lo mejor que se vera de aquí a Diciembre. Solo esperemos que nada, ni nadie interfiera en el progreso y el ascenso del Ídolo de los ecuatorianos.
Barce, gracias por existir, gracias por volver a deleitar a tus hinchas con futbol. Vuelve a ser el dueño y señor de todas las canchas del Ecuador, tu pueblo te espera!
Un abrazo desde Pennsylvania,
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