Es de conocimiento público que el actual campeón ecuatoriano de futbol pasa por la peor crisis económica de toda su existencia. Dicha situación no acontece desde hace poco tiempo, sino que por el contrario, se arrastra año tras año, directiva tras directiva, desde hace más de una década ya.
Sin embargo, esta condición no mejora. Las directivas no atinan la manera de solucionarla y lo peor es que la hinchada, que es la más popular del Ecuador, no colabora a superarla, especialmente los seguidores guayaquileños, ya que con su aporte es que el club se beneficia directamente.
¿Qué es lo que sabemos del problema?
1. que el club tiene una deuda de más de 15 millones de dólares.
2. que esta deuda fue adquirida por varias de las directivas anteriores.
3. que las gestiones para publicidad están ya agotadas.
4. que el dinero otorgado por las trasmisiones de televisión ya no existe.
5. que se le debe a organizaciones gubernamentales, privadas, ex jugadores, ex técnicos, ex trabajadores, etc.
6. que el club tiene mil y una demandas pendientes de pago.
En fin, la lista de las deudas y problemas parece ser interminable. Pero cuando es el momento de aportar con una idea, una solución, una salida, lo único que se atina a hacer es buscar a los culpables de la crisis y hasta mandarlos a prisión. ¿acaso no sabemos que aquellos responsables JAMAS reconocerán que han sido culpables de esta calamidad económica y que mucho menos aportaran dinero para solucionarla?
Indigna que los culpables queden en la impunidad, es cierto, ¿pero hasta cuando llorar sobre la leche derramada? ¿no es mejor aceptar la situación y buscar soluciones? ¿buscar un mejor futuro en lugar de lamentarse de catastrófico pasado?
Por ahí también se dice que el que llega a ser presidente del club, tiene que tener billete para sacarlo de la crisis, adquirir buenos jugadores, lograr campeonatos y demás. Pero en estos tiempos ya todos conocemos que el futbol es un negocio que no se basa ni se corre con el dinero de un ricachón que tiene la fortuna de ser popular y de haber llegado a ser presidente del club.
¿Cuándo vamos a cambiar la mentalidad de la gente respecto a de donde deben llegar los fondos para llevar al éxito a un club de futbol?
A modo personal, me molesta sobremanera la forma en que la mayoría se llena la boca diciendo que si se metieron a ser presidente del club, refiriéndose a Noboa, que si no tenia plata, para que se mente a ser presidente de Barcelona. Incluso periodistas comparten y transmiten esta idea como LA OBLIGACION del presidente. La verdad es otra.
Toreros, el futbol es un negocio y por ende el dinero para llevarlo adelante proviene de sus clientes, en este caso hinchas, y de sus auspiciantes. Que el presidente y/o los directivos, como todo dueños de negocio, aporten con el capital INICIAL para echar a rodar el negocio, sería lo ideal, más no que corran con toda la responsabilidad de la estabilidad económica del mismo.
Los directivos tampoco pueden regalar su dinero sin esperar recuperarlo y a la ganancia correspondiente a la INVERSION que han realizado. Nadie hoy pone un centavo en ningún lado sin esperar sacar provecho a cambio. Es simplemente la realidad de la vida y cómo funciona la economía mundial.
No esperemos que otros hagan lo que nosotros mismos no haríamos.
Ya no es tiempo de seguir protestando por los que hundieron al club. Ya está visto que esos jamás darán la cara ni ayudarán a salir de la crisis. Si los hinchas GUAYAQUIILEÑOS dicen amar al club, entonces que sean ellos los que ayuden a sacarlo adelante.
La solución es sencilla: si el Monumental se llenara fecha a fecha, en un par de años calendario se terminan las deudas y quedan los libros hasta en positivo.
Toreros, vamos a dejar de quejarnos y empecemos a apoyar. ¡Basta ya de ser mártires cuando se puede ser héroes!
Abrazos, ahora desde Staten Island, New York,
Alexandra K. Ortiz