Gustavo Costas dijo que iban a traer dos delanteros ante la salida de Ariel Nahuelpán.
Pero la dirigencia y el cuerpo técnico de Barcelona decidieron cambiar su postura y traer a tres delanteros y un volante. El colombiano Wilder Medina, el argentino Andrés Franzoia y el uruguayo Sebastián Ribas serán los pilotos de ataque de los toreros. A ellos se sumará el experimentado volante colombiano Fabián Vargas.
Los toreros cambian totalmente su cuota foránea para la segunda etapa del torneo; pero aún tienen en sus filas a dos foráneos con contrato vigente.
No sería la primera vez que este tipo de sustituciones hayan traído problemas al club, porque los contratos firmados no han dejado opciones al club para separar a un jugador que haya tenido un bajo rendimiento.
Si bien, a la vista estaría claro que los argentinos Gonzalo Castillejos y Nicolás Olmedo no han aportado lo que el club esperaba de ellos, la vigencia de sus contratos hace que tengan derechos laborales que se deben respetar y hacer cumplir, y a los cuales, seguramente, ellos no querrán renunciar.
La historia de Barcelona está llena de jugadores que al irse han jurado no hacer nada contra el club y que "están conscientes de que no aportaron lo que esperaban", pero que al estar en sus países cambian de postura e inician acciones legales que generalmente han ganado. El aspecto deportivo queda de lado cuando se vulneran derechos laborales y si Olmedo y Castillejos siguen entrenando, es porque esperan que el club les cumpla laboralmente, aun cuando ellos futbolísticamente no lo han hecho.
Escrito por Rodolfo Mazur Oyola
Fuente: Expreso
