Según las imágenes de televisión, el balón fue rechazado por Luis Checa, defensa del Barcelona, antes de que ingresara al arco, pero Muzo no informó de esto a Lara, quien posteriormente validó el gol.
“El asistente tiene la responsabilidad total tanto en el primer gol, que para mí es offside (fuera de juego de Víctor Estupiñán), y en el segundo gol, que el balón ni siquiera toca la raya”, comentó Ramos a eluniverso.com
“El balón queda a varios centímetros antes de pasar la línea, por lo que me queda la impresión de que algo pudo haber hecho el árbitro”, agregó.
Ramos destacó: “La responsabilidad es compartida; veo mucha más responsabilidad en el asistente, pero el árbitro es el jefe del equipo y era el único que podía cambiarla (o anular la anotación), y no lo hizo”.
Una decisión del árbitro Diego Lara generó controversia cerca del final del partido entre Deportivo Quito y Barcelona, encuentro jugado ayer en el estadio Atahualpa. El juez central, asistido por Marco Muzo, decretó como gol una acción en la cual se observó que el balón no ingresó al arco. La resolución determinó que el cuadro chulla ganara 2-1 a los toreros.
El DT Carlos Ischia y los dirigentes del equipo torero Antonio Noboa y Luis Noboa afirmaron ayer que el club fue perjudicado por el arbitraje.
Fuente: El Universo
