Con dos contragolpes letales de jugadores que hasta el año anterior defendieron la camiseta “negriazul”, Barcelona liquidó en su propio reducto al hasta ayer puntero del certamen, Independiente del Valle, y se mantiene en la segunda posición del certamen ecuatoriano.
Los “canarios” contabilizaron 31 puntos (+16), mientras el elenco del Valle se quedó con 29 unidades (+7) y descendió a la cuarta ubicación.
Los de Sangolquí, que ayer convocaron en su escenario a cerca de 9 mil aficionados, salieron a proponer el juego, logrando pases exactos, pero al momento de llegar al arco de Máximo Banguera perdían potencia.
De su parte, Barcelona solo esperó y en el primer contragolpe, cuando el cronómetro marcaba nueve minutos de juego, llegó el tanto de apertura.
Luis Caicedo remató de zurda, pero su tiro fue bloqueado por el golero local, Librado Azcona, quien dio rebote. El balón quedó suelto para Narciso Mina, que de derecha venció al guardameta paraguayo para poner el 1-0 a favor de los “amarillos” y anotar así su tanto número 12 en lo que va de la temporada.
A partir de ahí los dueños de casa lucieron nerviosos e imprecisos para entregar el esférico. Ni los gritos del técnico Carlos Sevilla ayudaron para corregir el mal momento del elenco del Valle.
Los porteños poblaron la media cancha y obstaculizaron el accionar de los “negriazules”, que no encontraron los espacios para intentar la igualdad. Ni de tiro libre estuvo fino el capitán Daniel Samaniego.
El 2-0 nació nuevamente de los pies de Caicedo, quien corrió por derecha y centró para José Ayoví. El delantero “torero” se elevó y mandó a guardar el esférico de cabeza a los 33 minutos del cotejo.
Las cosas se complicaron más para los locales tras la expulsión del defensa Édgar Balbuena, por una falta sobre Caicedo. La ventaja en el marcador le permitió al visitante dosificar sus energías y aguardar con tranquilidad la segunda etapa. Mas, antes de que concluya el primer período, los reclamos injustificados del volante Fernando Guerrero al árbitro Alfredo Intriago le significaron dos tarjetas amarillas y la salida del terreno.
En el camerino, los reclamos del estratega ecuatoriano a sus pupilos no cesaron, mientras que en el otro extremo la efusividad era evidente.
En la segunda parte, lo único que hicieron los dueños de casa fue defenderse e impedir que el marcador se incrementase. El ingreso de Jesús Solis y Lenín Poroso en el cuadro del Valle así lo revelaron.
Barcelona, con la ventaja alcanzada, tampoco se extremó por exhibir un buen fútbol y mucho menos desgastar sus energías; todo lo contrario, volvió a esperar a que sea el elenco de Sangolquí quien propusiera el juego y como eso no ocurrió las acciones de la segunda parte fueron poco atractivas.
Ambos elencos se conformaron con el marcador y protagonizaron un juego aburrido y sin emoción. Poquísimas fueron las llegadas de los visitantes y más escasas aún las posibilidades del local por conquistar, al menos, la del honor.
Desde la zona técnica, Sevilla, quien lució una bufanda con los colores de su institución, no tuvo más opción que dejar que el tiempo transcurriera. Lo importante para él era impedir que el marcador fuera más abultado y lo consiguió.
En los últimos minutos, Barcelona intentó aumentar la diferencia, pero sus jugadores no tuvieron puntería para vencer al guardameta Librado Azcona. Ese resultado permitió que los hinchas porteños despidieran a su plantel con el cántico emblemático “Un solo ídolo tiene el Ecuador”.
Fuente: www.eltelegrafo.com.ec