Al llegar a las inmediaciones del Capwell, los barcelonistas hicieron fila por 40 minutos para ingresar al escenario deportivo. Ahí, los policías requisaron los bolsos y cinturones de los hinchas. La orden era que nadie ingresara algo indebido al estadio, esto para que el espectáculo se realizara normalmente.
Apenas Omar Ponce dictaminó el final del partido “Pichi” se abrazó con Juan Tenorio como si fuesen grandes amigos. Con su voz afónica luego de cantar por Barcelona por más de cinco horas, Tenorio gritó “somos punteros carajo”.
“Pichi”, barrista de la Sur Oscura (no quiso dar su nombre), no había tenido contacto alguno con Tenorio previo al encuentro, pero la emoción del triunfo 1-0 sobre Emelec los hizo unirse para festejar la victoria y por la conquista del liderato del torneo por parte de su equipo.
Tenorio empezó a alentar al “Ídolo” desde las 16:30, cuando llegó a la “zona” (Malecón del Salado, junto a la Universidad Estatal), donde se reúnen los barcelonistas previo a los partidos de su equipo. Desde ahí, este hincha, en compañía de 3.000 personas más, inició a las 17:00 su caminata hacia el estadio Capwell.
Fueron una hora y 40 minutos de trayecto por varias avenidas, que los aficionados se tomaron primero la 9 de Octubre y luego la Machala para dirigirse a la “Caldera”. Los cánticos de los “toreros” fueron la constante de la caminata. “Un solo ídolo tiene el Ecuador, Barcelona campeón, Barcelona campeón, Barcelona es el campeón...”, gritaban los hinchas.
La única parada de la movilización fue en la Av. Machala, entre Clemente Ballén y 10 de Agosto, ya que en una casa del sitio había colgado una bandera del elenco “torero” con la leyenda “Tribilín apoya al Ídolo”. Los aficionados se tomaron un minuto para aplaudir el gesto y luego continuaron su camino.
En el trayecto, los miembros de la Policía designados para escoltar a los hinchas tuvieron varios encontrones con estos, a tal punto que se llevaron a tres personas detenidas.
Para mantener el orden, los uniformados recurrieron al uso del tolete, así como también dieron toques eléctricos a quienes no obedecían sus indicaciones.
Ya en las gradas de la tribuna de la calle San Martín, 5.000 aficionados identificados con Barcelona coparon la localidad. Tras la caminata, Priscila Núñez quiso comprar una botella de agua, pero no lo hizo debido a su costo.
“Cómo va a valer 1 dólar una botella con agua, esto no puede ser, no saben decir nada más que no sea 1 dólar”, reclamó airada Núñez.
“Oh, oh, oh... sale Barceloooo”, ese fue el cántico que hicieron los espectadores “toreros” cuando su equipo saltó a la cancha. Los jugadores fueron recibidos con una bengala por sus seguidores, esto pese a que estaba prohibida la utilización de estos juegos pirotécnicos al interior del estadio.
Los cánticos en contra de los emelecistas fueron mayoría durante el partido. Cuando Narciso Mina anotó el tanto del triunfo, los seguidores “amarillos” gritaron: “Ídolo, eres la alegría de mi corazón, la vida diera por verte campeón...”.
Al concluir el encuentro, el técnico Gustavo Costas emplazó a sus jugadores para que se acerquen a la tribuna San Martín y treparan sus mallas para festejar, junto con la “marea amarilla”, la conquista del Clásico del Astillero y de la punta.
Luego de esto, cuando los integrantes de la Sur Oscura se retiraban del estadio cantaron una barra que no entonaban hace algún tiempo... “somos los ‘toreros’ y somos los primeros”. La noche muere, pero el “Ídolo” es el líder del Campeonato Nacional con 34 puntos.
Fuente: www.telegrafo.com.ec