HARB: "EL MAS GIL TUVO QUE PAGARLE AL IESS"

Alfonso Harb, presidente de Barcelona, no aceptó recibir un trato especial y luego de tomar un tique con un número esperó su turno. “He venido a hacer cola, tal como lo hace la gente del pueblo”, declaró mientras movía entre sus manos un cheque de más de $ 42.000.

Ocurrió ayer en la sede principal del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), hasta donde el Pocho acudió para cancelar las cuotas atrasadas de los toreros de un convenio de pago que tiene con el IESS, que el viernes pasado le dio una semana para la liquidación.

Alfonso Harb, presidente de Barcelona, entregó un cheque a Agustín Salazar, tesorero del IESS, para cancelar parte de una deuda y evitar el embargo del estadio Monumental.

Si esto no sucedía la entidad habría iniciado el proceso de embargo y remate de la suite presidencial del Monumental, localidades de tribuna y general, cancha principal, los camerinos y otras zonas del escenario, según un convenio firmado por Eduardo Maruri con el IESS el pasado 21 de diciembre, un día antes de renunciar a la presidencia torera.

“Este es un pago histórico que el más gil lo tiene que pagar”, dijo Harb al acercarse a la caja. Son $ 42.458,74, una cantidad bastante alta por cuentas del pasado. Esto es lo que se debía por una cuota inicial, nos estamos poniendo al día”, indicó.

“Salieron a alarmar, a decir que debíamos (en alusión a Agustín Ortiz, director regional del IESS), que había que pagar, que hasta el viernes hay plazo. Se hizo un sacrificio para que no alarmen más”, agregó el máximo directivo torero.

“Este dinero es lo que dejamos de invertir en divisiones menores, en el primer equipo y en otras cosas del 2011, para pagar deudas de la década del noventa. De este tipo de cosas se agarran para hacer leña del árbol caído”, manifestó el Pocho.

Pero Maruri dijo varias veces que había dejado todo solucionado con el IESS. “Él lo que hizo fue firmar el convenio, pero nosotros lo tenemos que pagar”, respondió Harb.

Sobre la deuda torera con Interagua ($ 2 millones), Harb fue contundente: “No la pagaremos nunca porque no debemos un centavo del pasado. Violan la ley y los jueces lo permiten, no sé qué habrá. Nos quieren asaltar a llave cerrada, nos viven persiguiendo”.

A su salida del IESS, un grupo de personas que se identificaron como jubilados le gritó al directivo: “¡Fuera, Harb!”, a lo que el Pocho no respondió.

Textual: Amarillos

Alfonso Harb

PRESIDENTE DE BARCELONA

“Esta deuda (con el IESS) es una de las tantas que hay que pagar, como la de (Dussan) Draskovic, quien cobra por no haber sacado a nadie de las divisiones menores, o a (Duffer) Alman, que quiere dinero por no haber hecho nada en la temporada 2009”.

Tomado de: EL UNIVERSO