El Barcelona de Guayaquil se movilizo hasta la ciudad de Riobamba para enfrentarse con el Club Deportivo Olmedo para cumplir con la décima fecha de la primera etapa del campeonato nacional. En un encuentro falto de fútbol, en una de las peores canchas del país, el equipo torero fue total y completamente arrasado por el “ciclón” del Chimborazo al perder por 4 goles a cero.
La catástrofe torera empezó tan solo a la media hora de iniciado el cotejo. Gracias a un error de aquellos para pegarnos un tiro, llega el primer gol del Olmedo, la “sombrita” Hurtado fue apabullado durante todo el partido por los olmedinos y el error del primer gol fue el primero del racimo de errores que el Barcelona cometería durante todos los 90 minutos.
Tan solo 5 minutos después llega el segundo error y el segundo gol en contra para el equipo visitante. Con un marcador de 2x0 se retiraban los equipos al camerino. Iniciado el segundo tiempo, con horror los barcelonistas vimos como el “Poeta” no hizo ningún cambio en el equipo. Los barcelonistas estábamos esperando una remontada que muy en el fondo, sabíamos no iba a llegar.
Vimos a la barra volverse loca de la impotencia, del coraje y de la decepción. Perdieron los estribos, y cuando nos dimos cuenta, alrededor de unos 20 hinchas pudieron ingresar a la pista atlética del estadio riobambeño. El nerviosismo en el equipo torero fue en aumento, y llego el tercer gol gracias a un error ahora del “UNICO” - jugador amarillo que tuvo la cara de al menos disculparse por Twitter, Máximo Banguera, aflojo el balón y cayó el tercero para los locales.
El cuarto gol llego tan fácilmente que todos nos quedamos cruzados de brazos y con la mirada al vacio. Fue una pelota pérdida en media cancha donde OYOLA fue el único hombre que correteaba con el jugador local para tratar de obstaculizar el remate, pero le fue imposible, Máximo vio como por cuarta ocasión caía vencía su portería. ¿Por dónde andarían los centrales que era OYOLA el que acudía a ayudar en defensa?
Y hasta ahí se puede analizar el fútbol presentado por ambos equipos el día de ayer que se baso simplemente en ataques olmedinos, que atropellados, llegaban a como dé lugar hasta el arco de Máximo; por parte de Barcelona, volvimos a ver como se alinearon y cambiaron elementos sin sentido, sin ubicación y sin coherencia, y a unos jugadores falta de ánimo, de ganas, de orgullo, de vida.
El Olmedo de Riobamba con una plantilla que cuesta la mitad de lo que cuesta la del equipo guayaquileño fue capaz de marcar una abultada diferencia en el marcador. Y gracias a los riobambeños, en tan solo Marzo del 2011, se viene el Armagedón en la tienda amarilla. Armagedón que se pudo haber evitado, pero que simplemente fue más fácil hacerse el de la vista gorda, e ignorar todas nuestras alertas que instintivamente, como las antenas del Chapulín Colorado, “captaban la presencia del enemigo”, y nos engañamos todos al perder el sentido común y seguir solapando las necedades de algunos dentro de Barcelona.
Hoy no podemos más que meter la cabeza en una funda de papel si es que queremos salir a la calle, porque los que somos barcelonistas de verdad, no ocultamos la maldita vergüenza y frustración que sentimos al ver como un equipo modesta nos arrastra y acaba con la poca dignidad que nos quedaba.
¿Cuántos de nosotros ya a esta hora hemos sido “vacilados” por algún amigo hincha de otro equipo? Tal vez sea más fácil para nosotros los toreros meternos debajo de una piedra hoy. Pero nosotros no somos así, si otros se esconden, nosotros sí damos la cara y afrontamos las consecuencias DE LOS ERRORES QUE OTROS NOS HACEN PAGAR.
Hoy como barcelonista, con nombre y apellido digo que el señor Rubén Darío Insúa, Ídolo del Ídolo, se equivoco y para él más importante es mantener su esquema, su dictadura dentro del equipo y no dar el brazo a torcer y modificar las alineaciones, utilizar a otros elementos que pueden dar una mano en este equipo que se cae a pedazos.
Ahora, si bien es cierto, aquí el problema no es solo el técnico. El DT trabaja con estos jugadores todos los días de la semana y por ende verá el rendimiento que nosotros solo vemos el día de los partidos. Entonces al menos otorguémosle el beneficio de la duda al técnico. Pero, no se puede tapar el sol con un dedo y nosotros podemos ver, semana tras semana como los mismos jugadores no cambian su juego, no se esfuerzan, no corren, no recuperan, no les importa un soberano pepino la suerte del equipo.
Y ya como es la costumbre de los últimos 10 años más o menos, por ahí salieron los que piden “elecciones ya”, los que les echan toda la culpa de la pérdida de la primera etapa al presidente y al ex presidente. Pero estos que insisten en pedir elecciones, y en pedir que la hinchada “le diga lo que quiere” son incapaces de presentar siquiera un proyecto decente con el que nos proponga sacar adelante las ruinas de un club que alguna vez fue uno de los grandes de América.
Con el alma por el piso, con los sentimientos encontrados, anoche estamos seguros que millones de corazones toreros no pudieron descansar y conciliar el sueño. Los toreros ayer volvimos a vivir una de aquellas arrastradas, de aquellas sacadas de madre que se han hecho costumbre ya. En los últimos años han ido y venido jugadores, dirigentes, técnicos, que simplemente son “gallinas” de paso, o más bien “cuervos” de paso, mientras somos nosotros, los hinchas los que nos quedamos todos los días de nuestra vida aguantando, riendo o llorando, pero siempre con nuestro equipo.
Que alguien nos explique qué es lo que se está esperando para ya empezar a modificar el planteamiento en Barcelona. Aceptemos que ninguno de nosotros tenemos un título de técnico de fútbol colgado en alguna pared de nuestra casa, pero para AMAR y querer lo mejor para nuestro equipo, no necesitamos de un papel que diga que somos autorizados para hablar y opinar sobre el planteamiento técnico/táctico y sobre todo la suerte de nuestro equipo, solo y absolutamente de nuestro equipo, el resto no nos interesa.
En palabras del Chavo del Ocho, “salimos con el rabo entre las patas”, luego de que nos hayan sacado la “batimadre” y lo único bueno que salió de todo esto es que ya no nos pueden seguir dando excusas ni dirigentes, ni jugadores, ni técnicos y salirnos con el cuento de que todo está bien, porque es obvio que no lo está, que estamos a tan solo 3 meses de haber iniciado el campeonato y ya tenemos la mitad del barco hundido. Debemos empezar a echar por la borda todo aquello que no sirva en Barcelona, y no solo me refiero a los que saltan a la cancha, para ver si así, sacamos este barco a flote.
Toreros, con el alma partida en mil pedazos les digo que no es hora de echarnos el muerto el uno al otro, no es hora de culparnos y apuntar con el dedo porque así no se resuelve nada. Es hora de buscar soluciones y de mostrar unidad. ¿Por qué se nos hace tan difícil confiar en nosotros mismos? Eso es una herencia más de aquellos dirigentes que con sus malos manejos nos heredaron no solo deudas sino la desconfianza.
¿Alguien puede negar que el club esta JODIDO? ¿Alguien puede negar que las deudas sean innumerables? Pero sobretodo ¿alguien puede negar de que ni los hinchas ni socios confiamos el uno en el otro?
No se puede pedir ni exigir cambios mientras nosotros no seamos los primeros que cambiemos. No podemos ni siqueira pensar en que Barcelona llegue a un campeonato porque a estas alturas del la caída al abismo, eso no nos devolverá todo lo que necesitamos ni queremos. Hoy una copa, así sea del mundo, no alcanzara para cubrir toda la podredumbre que hay tras las puertas de las oficinas toreras.
Hoy no es cuestión de que venga alguien a pedir elecciones y a exigir la salida de Harb. Mientras no venga una persona con conocimientos, pero no dé cuenta bancaria, no de cuna de oro, no de vida pública, sino de estudios, de experiencia, de manos a la masa, el equipo no saldrá de la miseria en la que se encuentra.
¡En Barcelona no se puede hacer borrón y cuenta nueva señores! En Barcelona hay que agarrar las cuentas y pagarlas, hay que resolver todas las demandas, hay que tener dignidad para tener la entereza de levantar un proyecto desde la nada, ¡desde números negativos!
Lamento ver como en estos momentos no se piensa en ninguna otra solución que no sean elecciones y lo peor del caso es que no existen “candidatos” que piensen en hacer del club una institución fuerte, respetada, progresista, que no piensen en ser recordados como el presidente que LIMPIO a Barcelona. Ellos, los dichosos candidatos, solo les interesan ser recordados como el presidente que llevo a Barcelona a un campeonato, que lo vista de galas, aun cuando tengan la ropa interior podrida.
Es hora de cambios, pero el cambio debe empezar por nosotros los hinchas. Debemos dejar de esperar que venga un salvador y que haga otro lo que nosotros, si nos unimos, podríamos hacer.
¡TE AMO, TE SIGO, TE LLEVARE CONMIGO SIEMPRE MI BARCELONA!
Un abrazo desde Pennsylvania,
Alexandra K Ortiz
1 comentario:
100% de acuerdo. Nosotros los hinchas somos los 1ros que debemos cambiar. Basta de PEROS, basta de ver la culpa en los demas. Es momento de levantarnos y hacer nuestras tareas de hincha: Ir al estadio, Gritar cuando salen, cuando golean y mas aun cuando vamos abajo. Es hora de CREAR idolos. Cuando fue la ultima vez que creamos uno? fue Alfarito. Porque a los idolos los CREA LA HINCHADA. Y dejemos de escuchar tanta prensa contrera, juzguemos por nosotros y entendamos que nuestro deber unico es APOYAR, APOYAR y APOYAR!
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