jueves, diciembre 01, 2011

Una historia de irregularidad


El equipo guayaquileño que dirige el argentino Luis Zubeldia, Barcelona Sporting Club, se desplazo hasta el sur del país para enfrentarse de visitante con la Liga Deportiva Universitaria de Loja por la fecha 21 de la segunda vuelta del torneo local. El resultado fue un triunfo contundente para los lojanos, 3x1.

Aun a la hora que ustedes estén leyendo este comentario, seguramente se seguirán preguntando las razones por las que Barcelona no puede mantener un rendimiento parejo partido a partido. Recordemos que los toreros llegaron a Loja luego de haber derrotado al mejor equipo de esta temporada, SDQ, y sin embargo, el humilde LDUL logro no solo ganarles sino desbaratar cualquier esquema que los barcelonistas trataron de implementar en el césped.

De los 11 jugadores de Barcelona, son contados los que realmente tienen capacidad y calidad y ni ellos son constantes en rendimiento. En el partido de este miércoles vimos como muchos de los jugadores a un momento determinado, afrontaron la realidad del resultado y simplemente rogaban para que el tiempo corra y se acabe su suplicio. En Barcelona, señores, esto jamás debe permitirse, porque si de algo nos hemos jactado siempre los toreros es de morir luchando.

Hay una sola palabra que describe el rendimiento barcelonista en la fecha 21: ¡terror! Hablar, o más bien criticar a manera individual es simplemente llover sobre mojado. Ya todos sabemos cuáles son los defectos y cuáles son las “virtudes” de este Barcelona 2011. Con este resultado, todo el esfuerzo de los últimos meses, desde la época Noboa/Zubeldia, y la ilusión de llegar a un repechaje de copa Libertadores simplemente se complica y se vuelve hasta irreal en pensar en que se podría dar esta actuación internacional para los guayaquileños.

Lo que no podemos dejar pasar por alto es que la derrota la quieren justificar con el cuento de que todos los equipos se vuelven enormes ante Barcelona y que ahora el repechaje se aleja debido a que “dependen” de un resultado negativo de los militares, e incluso insinúan que SDQ se dejo ganar para así favorecer a El Nacional. ¿Saben con que palabra se califica esta clase de comentarios? VERGUENZA.

No podemos ir por la vida justificando nuestros errores basándonos en lo que hacen o dejan de hacer los demás. La Liga de Loja gano el partido porque fueron los que jugaron mejor, los que corrieron más y los que quisieron darle una alegría a su gente. Así de simple y sencillo. Para criticar a los demás primero tienes que corregir errores propios y si no lo haces, no hay que ser tan “caretuco” como para justificar lo que no tiene justificación. Hay que trabajar más y hablar menos.

Aclaremos que el cupo a repechaje o el cupo a la misma final no se perdió en Loja, se lo empezó a perder en el Monumental frente a LDUQ, luego en Manta y luego en Imbabura. Ahora, no todo es pérdida en estos meses. ¿Qué es lo que podemos sacar en limpio? Barcelona necesita reforzarse en absolutamente todas sus líneas. Zubeldia sabe lo que necesita y seguramente ya ha pasado su informe a la dirigencia.

Tampoco podemos olvidar que este mismo equipo, pero sin Diaz, termino octavo en la primera etapa y tan solo sumo 27 puntos. Si lo vemos así, estos meses han sido muy productivos. Pero la hinchada nunca ha querido ver productividad sino resultados que les siga llenando el pecho de orgullo. Esos resultados han sido esquivos desde el 97 y hasta el más “contreras” ha puesto sus esperanzas en Noba/Zubeldia para que la suerte de la comunidad amarilla cambie de una vez por todas.

Señores, amigos, toreros, ahora no es el momento de seguir reclamando, de seguir buscando culpables, ya eso es seguir arando en la arena. Ya todos sabemos cuáles son las falencias y sabemos también cuales son las respuestas y cuál es el camino a seguir. Como hinchas tenemos derecho a reclamar de aquí a la luna, pero también tenemos la obligación de apoyar tanto moralmente como económicamente al equipo.

Seguramente todos nos lanzaremos a la calle a pedir contrataciones millonarias y a EXIGIR que la dirigencia cumpla con lo prometido: un gran equipo 2012. Pero así mismo debemos aportar para que esos “cracks” lleguen a vestir la amarilla como alguna vez lo hicieron mundialistas como el ídolo Trobianni. Es hora de dejar atrás lo malo e ir a despedir al equipo de esta temporada 2011 con un estadio lleno, con el corazón lleno de esperanzas y el alma llena de convicción de que el próximo año empezara por fin a terminar esta pesadilla.

Barcelona es alegría y Barcelona es tristeza. Barcelona es un fenómeno que no se puede explicar y un sentimiento que no se puede parar y por eso su hinchada lo tiene que apoyar hasta el final.

Un abrazo toreros,

Alexandra K Ortiz

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